Diario Digital controlado por OJD

Sofía Castañón: "Negar la violencia de género como hace Vox es como el terraplanismo"

La asturiana estuvo acompañada por Victoria Rosell, Carlos Sánchez Mato y los cabezas de lista por Cantabria, Luis del Piñal y Leticia Martínez

Enviar a un amigo
Sofía Castañón: "Negar la violencia de género como hace Vox es como el terraplanismo"
27-10-2019

A.R.C

Sofía Castañón,  secretaria de Feminismos Interseccional y LGTBI en Podemos y candidata por Asturias de UP el próximo 10 de noviembre, estuvo este viernes en un encuentro con la gente en Santander.

La asturiana estuvo acompañada por Victoria Rosell, Carlos Sánchez Mato y los cabezas de lista por Cantabria, Luis del Piñal y Leticia Martínez.

La dirección nacional de la coalición, a pesar de conocer lo complicado que es volver a lograr un diputado nacional por Cantabria, está apostando por la región para que esa difícil tarea se convierta en una realidad.

Castañón atiende a Cantabria24Horas para analizar toda la actualidad y el momento en el que nos encontramos a pocos días de las elecciones generales.

El jueves tuvo lugar la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos. A pesar de que Pablo Iglesias lo calificó como electoralista, entiendo que estén contentos de que sea una realidad…

Lo primero de todo es que nos alegramos y celebramos que una deuda democrática que llevaba más de cuarenta años pendiente por fin se haya saldado. Es, sin duda, una celebración, siempre y cuando, sea el principio de la verdad, justicia y reparación pendiente en nuestro país. Mientras esto solo se quede en un gesto y no veamos que se retira la medalla al torturador Billy el Niño o que se siga negando la extradición a Martín Villa de Argentina, para que rinda cuentas por los crímenes contra la humanidad, no estaremos viendo de verdad un proceso que lleva más de cuarenta años de retraso.

¿Era el momento exacto para la exhumación?

Vuelvo a repetir que no hay que hablar del momento. Hay que hablar de lo que se tiene que hacer a partir de ahora. En función de lo que haga el Gobierno en funciones o el PSOE,  si sigue gobernando, sabremos si fue algo electoralista o no. Lo importante es el plan a seguir, ya que hay muchas personas en las cunetas y vidas que siguen en los márgenes de la historia. Todo eso precisa de una reparación que sigue pendiente. Por eso no digo a sí era el momento o no. Si todo esto se queda en un gesto, es que el PSOE lo ha utilizado de manera electoralista.

¿En la próxima legislatura Unidas Podemos, esté o no el Gobierno, llevará a cabo todas las acciones que sean necesarias para marcar esa reparación?

Sin duda alguna nosotros queremos hacerlo desde el Gobierno en la próxima legislatura. No queremos presionar, lo que queremos es estar defendiendo una memoria democrática que haga justicia a todas las víctimas del franquismo que está pendiente. En España no se puede hablar de democracia sin sonrojo si no realizamos esta reparación histórica.

Ha hablado de la intención de Unidas Podemos de estar en el Gobierno tras el 10N. Tras el fracaso de las negociaciones con el PSOE. ¿Son optimistas ahora?

Nosotros llegamos al 10 de noviembre con la intención de lograr unos resultados que nos permitan gobernar. La correlación de fuerzas que se dé después nos obligará a hablar con aquellos partidos que tengan como prioridad los intereses de la gente y no los de los poderes económicos, mediáticos o facticos. En definitiva, con quien tenga como prioridad los intereses de la mayoría social nos entenderemos para conformar un Gobierno que defienda a la gente y mejore sus vidas.

En noviembre se presenta Más País liderado por Iñigo Errejón, ex miembro de Podemos. ¿Qué opinión le merece?

En democracia todo el mundo puede presentar sus opciones políticas, luego la ciudadanía ya lo valorará en las urnas.

Por otro lado, las encuestas se han convertido en un actor muy importante en las elecciones. ¿Hay que creérselas?

Desde Unidas Podemos siempre hemos cogido con pinzas las encuestas, siendo los resultados buenos o malos. Entendemos que no es un indicador realmente tangible. El único indicador que importa es el de las urnas y es al que nos debemos.

Hay que hablar de violencia machista, de mujeres asesinadas cada semana. Es una lacra que sigue en la sociedad y que está costando erradicar…

No es una lacara, no es algo que no se pueda evitar. Existen políticas públicas, como la ley que hay que actualizar al ser insuficiente y que ojalá se cumpliera. Hablo de la Ley 1/2004, porque con esa ley que tiene 15 años podríamos estar evitando muchos asesinatos y mucha de esa violencia machista. Repito que no es suficiente esa ley porque solo contempla los casos en el ámbito de pareja o expareja y la violencia contra las mujeres se ejerce de muchas más formas. Necesitamos una ley que nos permita ejercer nuestra libertad sexual y que erradique las violencias sexuales. Necesitamos una ley contra la trata, necesitamos legislar frente a la violencia económica, necesitamos muchas cosas que dice el Pacto de Estado que no se han puesto en marcha de manera legislativa y saber además que es un pacto de mínimos y que no lo estamos viendo ejecutado. Así que creo que la violencia machista se puede evitar porque es un problema estructural y, por lo tanto, tiene que tener soluciones políticas que tienen que ver con recursos, con capacidad de ejecución, en los presupuestos y con la modificación en el BOE que es lo que nos rige y determina que cosas se están haciendo y cuáles no. Tenemos leyes que son importantes, pero necesitamos verlas ejecutadas; tenemos un Pacto de Estado que es de mínimos y que no está ejecutado o que hay leyes que están esperando aprobarse y ojalá se hubieran podido aprobar en la XII Legislatura y no dio tiempo.

Frente a estos planteamientos aparecen los de Vox…

El negacionismo de la violencia machista es como el terraplanismo: es negar cosas que son evidentes. No creo que sean opinables y, además, están fuera del marco de los derechos humanos. En realidad, es terrible tener los restos de un pensamiento preconstitucional dentro de las instituciones, pero también es un pensamiento minoritario. También aparece como la respuesta a la fuerza del pensamiento feminista que hay en la actualidad. El feminismo tiene más fuerza que nunca y es normal para quienes quieren aferrarse con nostalgia a tiempos preconstitucionales, tiempos en los que no había igualdad. Nuestro movimiento ha venido para quedarse y para hacer una sociedad mejor.

Por otro lado, tenemos el problema catalán y la violencia vivida en estas semanas. ¿Se podía haber evitado esta situación?

Si nosotros hubiéramos estado en el Gobierno con Sánchez habríamos contribuido a evitar esa situación de inseguridad ciudadana. Nosotros hubiéramos apostado por el diálogo para solucionar el problema. Aunque haya presidentes autonómicos que nos caigan mejor o peor e incluso que hagan políticas que desafían la convivencia, tenemos que estar dispuestos a interlocutar con ellos. Creo que no coger el teléfono como ha hecho Sánchez es una absoluta irresponsabilidad, una chiquillada. Es necesario que hablen Sánchez y Quim Torra y ahí hay que asumir que han fallado dos vías: el 155 como amenaza y el procés. Tras esto hay retomar el diálogo que es la base de la política.