La depuradora de Vuelta Ostrera no debe ser derriba
Por Álvaro Martín Quijano
Coincidimos y apoyamos la postura de la Vicepresidenta del Gobierno, señora Díaz Tezanos, en que sería una catástrofe ecológica para toda la zona del Besaya. La mejora de la calidad de las aguas del río Besaya desde la puesta en funcionamiento de Vuelta Ostrera es tan evidente y sustancial, que derribarla ahora sería como dispararnos en el pie y supondría perder años en la mejora de la ribera del Besaya y en las playas de Suances, después de década de degradación ambiental.
La Justicia está por encima del poder político, y es nuestro deber acatar y cumplir las sentencias, pero en este caso particular entendemos que además del respeto a la Justicia también deben de primar el sentido común, la capacidad de negociación y el pragmatismo, además del respeto al medio ambiente y a la economía de Cantabria.
Emplazamos al Gobierno de Cantabria y al Ministerio de Medio Ambiente de España a que a la mayor celeridad posible tomen todos los pasos necesarios para poner en marcha esa depuradora alternativa que sustituya a Vuelta Ostrera, para lo cual les ofrecemos todo nuestro apoyo.
Una vez solucionado este grave problema al que nos enfrentamos todos los cántabros, hay que abrir un periodo de profunda reflexión y análisis de esta situación. No es de recibo que todos los cántabros tengamos que hacer frente a un quebranto de millones de euros porque las cosas se hayan hecho mal en su momento. Los recursos públicos son limitados y por tanto se deben gestionar de la mejor manera posible