Ya están en funcionamiento las nuevas instalaciones de control aduanero en el Puerto de Santander


El presidente de la Autoridad Portuaria de Santander (APS), César Díaz, ha visitado esta mañana las instalaciones definitivas de control aduanero en el Puerto de Santander que, como ha señalado, se encuentran ya “a pleno rendimiento”.
Díaz, que ha estado acompañado por la delegada especial de la Agencia Estatal de Administración Tributaria de Cantabria, Alejandra Ruíz y la jefa de la Dependencia Regional de Aduanas e IIEE de la AEAT, Carmen Seguí, ha asegurado que las nuevas dependencias eran necesarias para “ optimizar el control aduanero de mercancías entre la Unión Europea y el Reino Unido haciendo mucho más ágil”.
Esta infraestructura, que ha supuesto la ampliación de la superficie de la inspección aduanera, es el resultado de la colaboración con la Agencia Tributaria y su servicio de Aduanas en Cantabria, “con quienes”, como ha señalado el presidente de la APS, “hemos diseñado y planificado este proyecto en el interior del Puerto”. “Se trata de que tanto la Guardia Civil (resguardo fiscal), como los funcionarios de Aduanas y los inspectores veterinarios del Puesto de Control Fronterizo, puedan desarrollar su trabajo en las mejores condiciones”, ha añadido.
“Hay que recordar”, ha señalado Díaz, que esta obra es “una más” de las “numerosas inversiones” que hemos tenido que afrontar desde la APS para “adaptarnos a la salida de la UE del Reino Unido, nuestro principal socio comercial, adecuando nuestras operativas y aumentando la seguridad contra las intrusiones junto a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”.
La actuación, que ha supuesto una inversión de 489.613 euros, ha consistido en la ampliación de la superficie de inspección aduanera y de una edificación de planta baja de servicios y oficinas, diseñada para atender las necesidades de este tipo de actividad.
En concreto, se ha instalado un módulo prefabricado de una planta con estructura metálica que alberga tres despachos, una sala de arcones de frío y almacenamiento de productos decomisados, una sala de mascotas y un recibidor, así como aseos para personales y pasajeros, siendo la superficie útil total de 102 m 2 .
Además, se dispone de una marquesina central colindante al edificio para cuatro líneas de vehículos bajo cubierta y otra separada para tareas de registro de vehículos en profundidad y con requisito de privacidad.
La obra se completa con señalización viaria para canalizar los flujos de vehículos, instalaciones de saneamiento, abastecimiento de agua y suministro eléctrico, área separada para inspección de furgonetas, y la redistribución de la zona de estacionamiento para vehículos pesados y la zona de estacionamiento para usuarios y pasaje.