VOX, Israel y el valor de una alianza estratégica y crítica

09-11-2024

Esteban Pérez

El respaldo de VOX a Israel tiene una base sólida: ambos comparten valores de defensa, seguridad y una cultura nacional fuerte que resiste a las amenazas y desafíos de un contexto internacional cada vez más polarizado. Sin embargo, apoyar a Israel no significa ignorar las ocasiones en que sus acciones generan conflicto o incomodidad, como ocurrió recientemente en el partido entre Ajax y Maccabi Tel Aviv. Durante este encuentro en Ámsterdam, la afición del equipo israelí no respetó un minuto de silencio dedicado a las víctimas de las recientes inundaciones en Valencia, lo cual fue percibido como una falta de respeto y sensibilidad en un momento de luto compartido. Estos gestos deben señalarse, no para debilitar una alianza, sino para fortalecerla desde el respeto y la reciprocidad.

Asimismo, VOX debería tener la valentía de señalar, aunque se trate de una minoría, los ataques que ciertos grupos en Israel perpetran contra comunidades cristianas. Aunque estos casos no representan al conjunto de la sociedad israelí, es importante que un aliado como España pueda denunciar con claridad cualquier acto de intolerancia o agresión. Las comunidades cristianas en Israel también tienen derecho a practicar su fe y a convivir pacíficamente, y VOX, como defensor de valores cristianos y europeos, tiene la responsabilidad de denunciar estas agresiones y abogar por el respeto mutuo en todas las religiones y culturas presentes en Israel.

VOX puede y debe apoyar a Israel estratégicamente, reconociendo los retos que enfrenta y la manera en que defiende su territorio y su identidad sin vacilaciones. La defensa de Israel ante las agresiones, tanto en su territorio como en el extranjero, es un claro recordatorio de que los ciudadanos y el Estado deben estar preparados para proteger su cultura y su gente. En Ámsterdam, por ejemplo, hemos visto agresiones impunes de ciertos sectores árabes extremistas hacia israelíes y judíos, episodios que nos recuerdan que el islamismo campa a sus anchas en Europa.

En España, sería valioso aprender de Israel esa determinación en la defensa de su identidad y su cultura, sin preocuparse por el "qué dirán". En muchos países, incluido el nuestro, la identidad cultural y la soberanía a veces quedan relegadas por el temor a ser percibidos como intolerantes. Israel, por el contrario, es un ejemplo de cómo un país puede resistir las presiones externas y mantenerse firme en la defensa de sus principios y valores. Para VOX, este enfoque es un modelo de inspiración: se puede ser fiel a los propios ideales y, al mismo tiempo, forjar alianzas basadas en el respeto mutuo y la autenticidad.

Es también importante destacar que las decisiones de política exterior del actual Gobierno de España, que ha mostrado una tendencia a apoyar a Palestina y, en algunos casos, a actores que no condenan la violencia de Hamas, no representan la opinión de todos los ciudadanos. VOX, en este sentido, busca transmitir una voz alternativa, dejando en claro que en España también hay un segmento de la población que valora la seguridad de Israel y el derecho de sus ciudadanos a vivir en paz.

VOX tiene en sus manos la posibilidad de defender una alianza con Israel que sea firme, estratégica y, sobre todo, crítica cuando sea necesario. Apoyar a un aliado implica reconocer sus méritos, pero también saber señalar las ocasiones en que sus acciones pueden afectar la relación y el respeto mutuo.