La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha anunciado hoy que el Gobierno autonómico formalizará antes del 10 de octubre sus alegaciones al anteproyecto de ley de condonación de la deuda y ha reiterado que, llegado el momento, lo recurrirá a los tribunales de justicia, porque es «una gran mentira» y un «negocio ruinoso para los cántabros».
«Cantabria no va a caer en la trampa de la condonación», ha dicho Buruaga en su intervención en el Pleno del Parlamento, el primero del nuevo periodo de sesiones, donde ha avanzado que el Ejecutivo dispone ya de un borrador de alegaciones ante lo que considera un «engaño colosal» y un «expolio a la solidaridad interterritorial» por parte del Pedro Sánchez.
«Un acuerdo impuesto, injusto y arbitrario que solo busca un traje a medida del independentismo, que es quien manda en este país», ha añadido.
La presidenta ha explicado que, con esta «maniobra trilera», cada cántabro deberá 461 euros más: 1.368 euros menos por la deuda autonómica, pero 1.829 euros más como español. Además, ha criticado que a cada cántabro se le condonarían 524 euros menos que a la media de los españoles, media que se situaría en 1.892 euros, frente a los 2.129 de un catalán.
«No hay quita, hay más deuda, porque la deuda no desaparece. Solo cambia de bolsillo y se mutualiza, se reparte entre todos los españoles», ha puntualizado.
También ha desmentido que Cantabria se vaya a ahorrar 20 millones de euros en intereses, puesto que esa cifra se minimiza al elegir el Gobierno los FLA (Fondo de Liquidez Autonómico) con los tipos más bajos que menos ahorro suponen. Concretamente, la presidenta ha estimado que el ahorro en intereses hasta 2028 sería de poco más de 7 millones de euros.
Por otro lado, ha advertido que se trata de una «condonación en diferido que se dilata en el tiempo», ya que los préstamos siguen generando intereses hasta su vencimiento. Esto significa que, en el caso del FLA, Cantabria seguirá pagando intereses por 8 millones al año hasta 2029, es decir, 40 millones de un total de 78 millones, más de la mitad.
«Una auténtica tomadura de pelo», ha denunciado Buruaga, la misma que decir que los ahorros obtenidos pueden ser utilizados para mejorar la sanidad, la educación o los servicios sociales, puesto que, según la AIREF y el propio texto del anteproyecto de ley, éstos no podrían emplearse para incrementar el gasto computable en la regla de gasto.
«Todo el mundo sabe a quién favorece este acuerdo político que sirvió para comprar la investidura de Pedro Sánchez con el dinero de todos. A él y al separatismo», ha aseverado.
La jefa del Ejecutivo ha reiterado que Cantabria no ha pedido esta «falsa condonación» ni necesita seguir acudiendo al FLA para financiarse. En este sentido, ha reivindicado que su Gobierno ha recortado «la deuda de verdad» hasta el 17% del PIB y ha logrado una doble A en solvencia financiera, lo que le permite, por primera vez desde 2014, acudir a los mercados para refinanciar el FLA de 2024, con un ahorro real de 23 millones en diez años.
«Nosotros hemos hecho los deberes», ha enfatizado.
A su juicio, «la única solución real y efectiva pasa por la restructuración de la deuda frente a la condonación y por la reforma del sistema de financiación autonómica de forma multilateral y transparente frente al cupo separatista».
Finalmente, María José Sáenz de Buruaga ha apelado a la responsabilidad de los grupos parlamentarios para defender el interés de los cántabros «frente a los privilegios entre territorios y la desigualdad entre ciudadanos» y ha asegurado que el Gobierno va a dar la «batalla democrática» en este asunto.
«Yo no voy a vender la dignidad de nuestra tierra ni el interés general de los cántabros para salvar a Sánchez ni al independentismo», ha concluido.
